CUADERNOS DE TZADE

Cosas que me pasan, cosas que pienso, cosas que digo y cosas que callo

05 agosto 2005

La historia de amor más hermosa del mundo


Lloviera agua o llovieran bombas, ella recorría cada día nosecuantos kilómetros para llevar a su marido comida a la cárcel. Él comunista, Ella facha; los comunistas le mandaron a la cárcel por haberse casado con ella. Fuera cual fuera el color de su bandera, Ella siempre ayudó a no morir a cualquier soldado que encontrara en peligro y nunca delató a nadie. Tuvieron un hijo y siete años después una hija. Cuando su hijo murió de meningitis ella comenzó a consumirse y se limitó a rezar y a subsistir, siempre vestida de negro. Ella se ocupó de llorar a su hijo muerto, Él se ocupó de rescatar de la tristeza a su hija viva.

Él era un relojero del pueblo, hijo de un comerciante de telas.Ella era la hija de un señor que escribía poemas preciosos, tocaba el violín y arreglaba cosas. Era hija única, pues su hermano mayor había muerto de meningitis cuando era muy pequeña. La vió pasar con un vestido blanco y dijo a sus amigos "con esa me casaré". Sus amigos se rieron, Ella no salía nunca con nadie. Él alegó "el que la sigue la consigue". Se acercó y le dijo "Señorita, ¿me permite acompañarla?". Ella se negó. Pero él cada día la buscaba y se acercaba a ella haciéndole siempre la misma pregunta. Al salir de la relojería la esperaba en la puerta de casa todas las tardes; la madre de ella decía "Ahí tienes al tic-tac". Pasados unos treinta años desde que el tic-tac esperara pacientemente una cita, les ví sentados en la mesa de la cocina estudiando matemáticas. Ella había decidido graduarse a los cincuenta y él le pasaba la mano por el hombro y le explicaba con la misma voz de quien recita un poema cómo se hacía una raíz cuadrada. No quise entrar, pasé de puntillas sin hacer ruido dejando que el amor y las raíces cuadradas intimaran entre las cazuelas.
Gracias abuela; gracias mamá.