CUADERNOS DE TZADE

Cosas que me pasan, cosas que pienso, cosas que digo y cosas que callo

08 agosto 2005

Elevadas temperaturas

A las cinco y media de la madrugada un termómetro en la calle marcaba 37º C, otro 38º C. Cuando salí de la primera clase, pasadas las once de la mañana, se respiraba con dificultad, pues el aire era más caliente que la temperatura del cuerpo, cada paso era difícil. A las dos del medio día el sueño empezó a vencerme, pero desperté a las cinco de la tarde, cansada, con sueño y sin embargo, con la absoluta imposibilidad de seguir durmiendo. Son las seis; está muy nublado, el bochorno pesa sobre las venas como pesan los recuerdos al acercarse la Navidad, el aire es muy caliente, el viento arde.
La pregunta del millón es: ¿qué coño pinta una mujer paseando a las cinco y media de la madrugada? La respuesta: quise dar los buenos días al hombre misterioso y no dudé en plantarme en la estación de tren para interceptarle en su camino al trabajo. ¿Qué pasó? Después de la ducha y el resto de la siesta lo cuento.