CUADERNOS DE TZADE

Cosas que me pasan, cosas que pienso, cosas que digo y cosas que callo

28 agosto 2009

De Madrid al Cielo II

Los funcionarios del INEM son unos ineptos; los cajeros y directores de bancos unos gilipollas integrales. De fondo comprendo que en el INEM todo esté repartido entre tantas manos y cabezas que forzosamente se comenten errores con molestas consecuencias para los usuarios y ninguna consecuencia para el funcionario. De fondo entiendo que el banco tiene sus normas y que la amabilidad con el cliente no parece ser una de ellas, al menos no con los clientes que tenemos cara de pobre. Llegué al banco agotada del viaje, con hambre, con sueño y con muchas ganas de ver a los amigos. En el banco me obligaron a dejar la maleta en la puerta y pasé más de 20 minutos con el ojo derecho en la puerta y el ojo izquierdo en la cajera que se tomaba su tiempo hasta para respirar, haciendo caso omiso a mi desesperación. Respondí seca a sus preguntas reprimiendo la sonrisa social que me sale sola y debía recordarme a mí misma que estaba muy enfadada y quería que se notara. Es una mierda esto de que los enfados me duren tan poco. Me despedí educada y seca, lanzando al director del banco una mirada asesina que no pareció afectarle lo más mínimo. Camino arriba el tirador de la maleta se rompió. El camino se alargaba y las piedras de la calle se reían de mi sombra.